Viernes por el Futuro México
Sobre la huelga #VidaContraCapital
Viernes por el Futuro México junto a más de 25 colectivas aliadas nos manifestaremos con el eslogan #VidaContraCapital este 25 de marzo en diferentes puntos del país para denunciar que la crisis climática es una lucha de clases y exigir una solución comunitaria, decolonial y anticapitalista. Esta movilización ocurrirá en el marco de la huelga climática mundial convocada por Fridays For Future.
En la Ciudad de México, el movimiento se manifestará a las 15:00 hrs. desde el Ángel de la Independencia hacia el Zócalo, invitamos a todos los medios de comunicación a que nos acompañen. Asimismo, habrá movilizaciones en otras ciudades del país, como Guadalajara, Monterrey, Mérida, Toluca, La Paz, entre otras. Los detalles de cada acción a nivel nacional pueden encontrarse en viernesporelfuturo.org/marzo25.
El escenario climático catastrófico en el que vivimos es resultado de siglos de explotación y opresión a través del colonialismo, el extractivismo y el capitalismo, un modelo socioeconómico donde el Norte global es responsable del 92% de las emisiones en exceso causantes del cambio climático, y el 1% más rico de la población mundial ha emitido más del doble de carbono que el 50% más pobre.
El capitalismo, y específicamente el imperativo del crecimiento capitalista, es la causa principal del colapso ecológico. Este sistema económico produce déficit ecológico y desigualdad porque el mecanismo fundamental del crecimiento capitalista es que el capital debe extraer (de la naturaleza y del trabajo) más de lo que da a cambio para poder acumular.
La clase dominante, a través de corporaciones y gobiernos del Norte Global dominados por hombres cis-masculinos heterosexuales, blancos y adinerados, han ejercido su poder, ganado a través del colonialismo, el capitalismo, el patriarcado, la supremacía blanca y la explotación, para destruir la tierra y sus ocupantes sin remordimiento.
Sacrifican deliberadamente los ecosistemas y los pueblos del Sur Global en aras de su supuesto "desarrollo" y "crecimiento económico" eterno. Mientras tanto, la clase trabajadora es utilizada como herramienta para construir el mismo sistema que los está destruyendo.
Diversas colectivas hemos coincidido que la crisis climática es el síntoma y la enfermedad es el capitalismo, por lo que convenimos unirnos para decirle al país que es momento de #VidaContraCapital.
La crisis climática no es sólo el incremento de la temperatura global, huracanes, incendios forestales y contaminación. Si bien esos son fenómenos importantes de los que el movimiento climático debería dar cuenta, no lo son todo. La crisis climática es una crisis eco-social, cuyos efectos van desde extinciones de especies hasta la violencia racista contra les migrantes en la frontera sur de México. Es por eso que es momento de reconocer que cuando hablamos de justicia climática, tenemos que hablar de justicia para las personas históricamente oprimidas. Así, esta protesta será conformada por contingentes representantes de diferentes movimientos: infancias y escuelas, LGBTQ+, defensa de territorio, barrios y pueblos, discapacidades y neurodivergencias, anti-racismo y anti-patriarcal.
Las infancias, producto del sistema adultocentrista, son violentadas, minimizadas, manipuladas y excluidas. Al punto en el que sus voces, opiniones y perspectivas no son tomados en cuenta en ningún aspecto social o político. Cansades de esto y para que sus voces sean escuchadas han decidido participar en la huelga global por el clima. ¡La lucha climática será con infancias o no será!
Las personas LGBTQ+ han escrito y reescrito la historia por la justicia climática: este contingente denuncia la violencia capitalista que ve nuestros cuerpos y a nuestro planeta como algo desechable. Marchará en contra de la herencia colonial que binariza tanto a la naturaleza como al género, y con ello criminaliza la sexualidad, y a todo lo “incivilizado”, “salvaje”, “monstruoso”; marchará contra la blanquitud que día con día deteriora los espacios queers y ambientales. Ni la tierra ni nuestros cuerpos son producto de consumo, este contigente se levanta porque decide creer en un mundo comunal.
El contigente anti-racista denuncia que históricamente, los pueblos de Abya Yala (nombre con que se conocía, antes de la colonización al continente que hoy se denomina América), mayoritariamente indígenas, empobrecides, marginalizadxs, racializadxs, han sido y son despojados por los intereses capitalistas de empresas nacionales y trasnacionales, que bajo el discurso de la “modernización” como “el progreso civilizatorio” –impuesto hace más de 500 años- se han introducido de la manera más rapaz y violenta, con el objetivo de convertir los bienes naturales, culturales y patrimoniales en mercancías, reflejando así el saqueo de muchas comunidades.
Ha sido necesario comprender que es lo que está pasando para lograr establecer alternativas colectivas frente a la nueva colonización; para este contingente, es de suma importancia entender que el despojo territorial, la mercantilización de los bienes comunitarios a través del turismo, el extractivismo minero y la crisis medio ambiental son el resultado de la colonización y recolonización de nuestros pueblos y comunidades y son mayoritariamente personas racializades quienes padecen el aniquilamiento de la vida pero también, son quienes han apostado a seguir buscando soluciones desde las comunidades para subvertir al sistema que nos mantiene oprimidxs. ¡Sí a la vida, no al capital porque es una lucha anticolonial!
El contigente anti-patriarcal advierte que las mujeres son más vulnerables a las consecuencias de la crisis climática, no sólo porque representan a la mayoría de la pobreza mundial, sino también porque estadísticamente son más dependientes de los recursos naturales actualmente amenazados. Las mujeres son las primeras en fallecer a causa de la sequía, hambruna e inseguridad alimentaria en general.
Las mujeres del Sur global han estado delante en la defensa territorial en cada una de sus comunidades, demostrando así que la lucha contra el sistema patriarcal y la defensa de la tierra es una misma.
Las discapacidades y neurodivergencias han decidido participar en esta huelga por el clima porque desea tomar el espacio público, tanto presencial como virtual, para hablar de capacitismo, sus luchas contra éste y el futuro que imaginan y quieren, un futuro libre de discriminación y violencia. Cuando hablamos de justicia climática, tenemos que hablar de justicia para las personas discapacitadas y neurodivergentes.
Todas las luchas anticolonialistas, antipatriarcales y anticapitalistas son bienvenidas, todes les oprimides son protagonistas de la huelga climática.
Los colonizadores y los capitalistas están en el centro de todos los sistemas de opresión que han causado la crisis climática; el mejor tipo de acción climática es la la descolonización, utilizando la herramienta de las reparaciones climáticas y el decrecimiento del Norte global.
El 1% de los capitalistas más ricos debe ser considerado responsable de sus acciones y su ignorancia deliberada. Su ganancia es nuestra muerte. Su beneficio es nuestro sufrimiento.
Junto con diferentes sectores de la sociedad en todo el mundo, liderados por los más marginados, devolvamos el poder a las personas cuyo poder ha sido robado. Juntes, construyamos un sistema y un hogar donde prioricemos la vida contra el capital. Les esperamos este viernes 25 de marzo a las tres de la tarde en el Ángel de la Independencia.